Capitulo 10

Marcos y Bruno están desnudos en la cama. Sudados, complacidos. Bruno se enciende un cigarro. Está muy satisfecho. Le tenía muchas ganas a Marcos y está feliz de haberlo tenido.
--¿quieres un cigarro?
--No, no fumo.
Marcos se muestra distante. Frío pero a Bruno no le importa porque ya ha logrado de él lo que le interesaba.él. Bruno enciende el cigarro. Entre calada y calada le comenta:
--así que se te pasó el amor enseguida.
Marcos lo mira molesto. No dice nada. Bruno se ríe.
--Yo lo sabía... sólo buscas sexo..
A Marcos le molesta que Bruno traiga a Pinocho a esa cama. Le agarra el cigarro y da una calada para relajarse.
--así que también mentiste en esto ¿no? --Bruno riendo.
Marcos sale de la cama. Su cuerpo totalmente desnudo. Marcos es unos años menor que Bruno y conserva un aire casi adolescente que fascina a Bruno.
--No te enojes... era broma.
Marcos se sube los calzoncillos y los jeans de prisa.
--No estoy enfadado. Simplemente ya tuve lo que vine a buscar. Era una simple necesidad que ya cumplí.
Marcos ha querido seguir a su cuerpo, ya le ha dado gusto pues ya no le interesa más. Bruno desde la cama le comenta:
--pues nada cuando me necesitas ya sabes.
Marcos se sube la cremallera y se abrocha los pantalones. Se muestra tosco.
--No me interesa tener nada serio contigo.
Con el cigarro en la boca, Bruno sonríe seductor:
--Ni yo, simplemente cuando te quieras desahogar pues no tienes que buscar a otro... Me tienes a mí.
Marcos se va sin decir nada. Se ha relajado. Está descargado pero se siente vacío. Su vida ha sido siempre así. Una conquista de lujo y luego otra y otra porque ninguna le aportaba nada. Sólo se ha sentido vivo con Humberto pero ahora él está distante. Y Pinocho. Se le ha metido muy a dentro.
--¿¿¡que me hizo ese maldito negro?¡
Marcos está furioso consigo mismo porque no logra sacarse de la cabeza a Pinocho. él mismo no entiende lo que le pasa.
--¡fue un polvo más¡ ¡no pasó nada más¡
Se ha acostado con bastantes desconocidos a los que ni recuerdo:
--¿porque es diferente ahora?

Por su lado, Humberto y Pinocho llegan en el auto de Humberto a casa de éste.
--¿seguro que no te molesta que me lleve tu auto? --Pinocho.
--No, claro que no. Te lo presto sin problemas, hay confianza.
Los dos se miran con caras de depravados. Humberto sube a su casa muy contento. Se empieza a desnudar yendo hacia su cuerpo. Se sorprende al ver en la cama a un joven desnudo. Para de desvestirse. El chico lo mira con deseo.
--por mi no te pares, te he visto desnudo miles de veces.Me conozco tu cuerpo de memoria, tio.
Lo de tio es con ironía. Humberto ha recibido la visita con sorpresa.
--¿¿qué haces aquí, Aitor?
El recién llegado salta de la cama. Le gusta lucir su cuerpo desnudo.
--te vi dejar el auto a ese negro ¿es tu novio?
--¡yo no tengo novio¡ --Humberto molesto.
Lle a la camisa y los pantalones desabrochados. A Aitor le excita mucho.
--¿que tienes tú con ese negro cabrón?
--desde cuando eres racista.
--no soy racista pero da la casualidad que es negro.
Aitor habla como si estuviera celoso, como si sintiera que tiene derechos. Humberto lo trata como a un problema.
--No te metas en mi vida.
--¿quieres que le diga a mi padre las cosas que hicimos?
--¡los dos tenemos cosas que perder ¡éramos adolescentes¡ --alterado.
--Tú eres el mayor  ¿qué diría mi padre si supiera que su hermano me desvirgó?
Aitor se siente poderoso, siente que es el que manda. Humberto se desespera. No es una parte de su pasado que le guste recordar.
--¡tú querias, tú me espiabas¡ ¡¡querias macho¡
--y aún lo quiero... tu has sido el mejor amante que he tenido.
Aitor se muestra coqueto. Lo quiere seducir. Humberto agarra la ropa del chico y se la tira a la cara.
--¡pues te buscas otro¡ --Humberto con dureza.
En la mesita de noche, Humberto tiene una foto con su novia. Aitor la señala y dice con ironia:
--¿y aún estas con esa puta?
--¿qué te importa? --a la defensiva.
--¿sabe que estás con ella para guardar las apariencias pero que eres maricón?
--¡¡yo no soy maricón¡ 
Humberto está furioso. A Aitor le gusta molestarlo:
--¡te encanta acostarte con machos¡
--No es cierto, tú has estado con más machos que yo¡
--entonces sí he sido algo especial para ti... ¿porque ahora no? --Aitor seductor.
--¡porque no¡ --seco y cortante.
--¿tanto te gusta el negro? --celoso.
--deja a Pinocho en paz¡ --duramente.
--¿y ese nombre tan ridiculo? --burlón.
--¿que quieres, Aitor? --a la defensiva.
Aitor disfruta jugando con Humberto , sintiendo que lo controla:
--¿y tu amigo Marcos sigue enamorado de ti?
--¡deja en paz a Marcos¡
--seguro que le interesará saber que tras tu fachada de hetero se esconde un gay como él... Si tú no te acuestas conmigo pues él me dará lo que yo quiero.
Y para que se calle Humberto lo besa y cogen. Al rato Aitor está en la cama roto de placer. Su tío ha sido más salvaje que  nunca y le ha encantado. Humberto se levanta desnudo y le tira la ropa a la cara:
--ya tienes lo que quieres... ¡ahora vete¡
--no, quiero vivir en tu casa--desafiante.
--¡ni loco¡ --furioso.
--mi padre te va a llamar, te va a pedir ese favor... Si le dices que no le tendré que contar que sólo quieres acostarte conmigo--ironico y amenazante.
Humberto se lleva las manos a la cabeza sofocado:
--¿que es lo que quieres?
--¡a ti¡ --obsesivo.
--¿y porqué te ha dado por eso? --sorprendido.
--Soñé que haciamos un trio tú, yo y tu amigo Marcos. No estaria nada mal, quiero que lo hagamos --excitado.
--¡yo no voy a hacer un trio¡ --molesto.
--en todo caso pues me acostaré con Marcos... asi podré comparar--picaro.
Humberto mira a Aitor nervioso.
--¿porqué te gusta trastornarme la vida?
Aitor lo mira coqueto. Le habla burlón:
--puede que sea una venganza, durante años tú fuistes el único hombre para mi y me hacias sufrir. Me hacias humillarme para darme lo que yo deseaba, te gustaba verme ansioso. Me tomabas y me rechazabas cuando querias... ahora me toca divertirme a mí.
Humberto resopla nervioso.
--¡bueno puedes quedarte en la otrta habitacion pero como me des la lata te vas con tu padre y cuentale lo que querias...¡
Aitor siente que domina la situación y eso le gusta.