viernes, 7 de agosto de 2020

Capitulo 9




Pinocho está acostumbrado a conocer a chico guapo, disfrutarlo e irse sin mediar palabra. Carlos Emilio no. Él busca una relación, centrada en el sexo pero relación. Pinocho tiene toda la intención de irse sin decir nada. A Carlos Emilio le cuesta caminar porqué no está acostumbrado a algo tan enorme pero lo sigue porque le gustaría tener algo más con Pinocho.
--oye cuando nos vemos..
Pinocho le habla desde la puerta: 
--¿para que? 
Carlos Emilio está nervioso. No es nada lanzado. Le cuesta expresarse pero después del momento que ha vivido no quiere dejar escapar a Pinocho: 
--no sé para concretar esto..
A Carlos Emilio le gusta mucho Pinocho. Pinocho lo mira frio: 
--no hay nada que concretar, ya tuve de ti lo unico que me sirve, date por bien afortunado por haberme conocido una vez. Mejor te buscas a otro igual que tú... no me sirves.
Pinocho se va sintiéndose muy macho, Carlos Emilio se queda solo. Triste. Le duele que Pinocho lo haya usado y tirado pero almenos esa noche se acostará satisfecho. 
Pinocho abandona el local justo en el momento que Marcos desaparece de la entrada con su moto. 



Comienza un nuevo día, Alejandro recibe en su despacho a Bruno. Los aires tan amanerados del fotógrafo divierten al brasileño pero sabe que con ese hombre su futuro puede ser próspero asi que hace un esfuerzo para que no se le escape la risa. Alejandro se levanta. Mira con deseo su nueva adquisición. 
--que bueno que pudiste venir tan pronto --dice Alejandro acercándose a la puerta y poniendo el cerrojo. 
Bruno sabe que debe mostrarse complaciente: 
--si, me dijo Antonio que era urgente.
Alejandro se acerca al hombre. Admira la pieza. 
--Yo te voy a pagar muy bien pero ¿conoces las condiciones del contrato? 
Bruno se arrodilla ante él y le baja la cremallera: 
--y las voy a disfrutar mucho.
Alejandro le acaricia la cabeza mientras Bruno se comporta tal y como Alejandro espera. 

Humberto sale de su casa. Se sorprende al encontrar a Marcos en su puerta. 
--¿qué haces aquí? 
Marcos se sorprende de la frialdad de su amigo. 
--¿y desde cuando tengo que pedirte permiso para verte? 
--No, si claro..
Marcos mira a su amigo sorprendido: 
--¿estás muy raro?¿qué te pasa? 
Humberto no le quiere contar a Marcos que ha estado con Pinocho. No quiere que lo tache de gay, que le comience a decir que si se queria acostar con un chico porque no lo elegió a él. Por todo esto es  sabe que es mejor callar pero también sabe que le va a ser muy dificil ocultar ese secreto. 
--¿y tan temprano te vas a trabajar? 
Humberto hace que sí con la cabeza. Evita mirar a su amigo para que no note la pequeña travesura de la noche antes. Tiene claro que no volverá a ver a Pinocho asi que tampoco ve porque tiene que contar nada. 
--es que estoy apurado..
Humberto va a pasar de largo pero Marcos le agarra del brazo. 
--venga,. no me digas que no tienes dos minutos para tomar un café con tu hermano..
Aunque le pone nervioso estar con Marcos, Humberto tiene claro que debe hacerlo porque sino es así como Marcos va a sospechar nada. Van a una cafeterïa cercana. Humberto apenas habla. Marcos está metido en sus cosas que tampoco se da cuenta. 
--No me puedo quitar de la cabeza a Pinocho. 
A Humberto se le atraganta al café que estaba tomando pero así como si no supiera de quien habla. 
--¿quien? 
--Si Pinocho, aquel negrazo que conocí¡¡si te hablé de él¡ 
Humberto siente algo parecido a los celos. 
--¿lo has vuelto a ver? 
--No, se me perdió el número y él no me llamó... ayer lo busqué pero no lo encontré..
Eso tranquiliza a Humberto : 
--pues será uno más. Seguro que como has hecho tú tantas veces pues no tendrá intención de volver a llamarte.
Marcos no se está dando cuenta que su amigo se está convirtiendo en su rival. Le duele pensar que tal vez tenga razón: 
--es que ayer rechacé a un brasileño impresionante por pensar en Pinocho.
El interés de Marcos hacia Pinocho pone celoso a Humberto y aumenta la atracción de Humberto hacia el hombre. No piensa dejar que se quede con su amigo. No es algo que planee, simplemente no quiere. 
--tú siempre has sido muy lujurioso. Será un capricho más ¿además no has dicho que yo era el único hombre que te despierta sentimientos? 
Aunque no le gusta hablar del tema, Humberto recurre a eso para que Marcos olvide a Pinocho. A Marcos le sorprende que su amigo saque el tema: 
--¿es que me vas a corresponder? 
--No porqué no vas serio con nadie.
Marcos mira a Humberto enamorado: 
--contigo seria diferente. 
Humberto se levanta. Le guiña el ojo: 
--¿no es que estabas muy interesado en el tal Pinocho? 
Humberto ha logrado lo que queria, hacer dudar a Marco. Humberto tiene necesidad de marcar el terreno. No quiere que Marcos le gane. Llama a Pinocho. Lo despierta. 
--¿Humber ? ¿porqué me llamas de madrugada? 
--es que necesito verte..
Humberto se muestra ansioso y a Pinocho le gusta haber dominado y seducido a una persona como Humberto que no acepta que es gay. 

Emilio entra en el set de fotos cargado de carpetas. Se queda en shock al reconocer en el nuevo modelo al desconocido del auto. Va en boxers y se le mueve una cosa de tamaño medio en el interior. Alejandro le da un golpe en el cabeza para que espabile y deja de mirar haciendo que a Emilio se le caigan las carpetas. Alejandro se pone como loco: 
--¡que me tienes harto, asqueroso¡ ¡¡que no te pago para que mires, te pago para que trabajes, vago, bueno para nada, inútil¡ ¡tu sueldo es una miseria pero es que te mereces la mitad¡ ¡¡no me ayudas en nada¡ 
Emilio aguanta la habitual lluvia de desprecios y gritos, todo sea por trabajar rodeado de chicos tan guapos y tan ligeros de ropa. 






Después de compartir un explosivo polvo, Humberto y Pinocho comparten un cigarro. Los dos desnudos en la cama. Sin mirarse. Hablan entre calada y calada. 
--No esperaba volver a verte. No sé... parecias enojado.
Humberto no quiere decirle que está con él por celos porque Marcos está muy interesado en volver a verlo. 
--No para nada.
--No sé si es que no quieres aceptar que eres gay o te sabe mal por tu amigo...ñ
--No soy gay y sobre Marcos, él tiene a otro... un brasileño que le tiene loco.
Humberto quiere ver si Pinocho se muestra celoso para ver que tal grado de interés tiene en Marcos. Le satisface ver indiferencia en Pinocho. Para asegurarse la cosa le pregunta. 
--¿te molesta que Marcos se esté acostando ya con otro? 
Pinocho se le ríe: 
--¡celoso yo? entre él y yo no hay nada¡ 
Humberto se queda satisfecho. Se pega a él y seductor le dice: 
--cierto, es una suerte. 
Se sonrien y se besan. 
--¿repetimos? --pregunta Pinocho excitado. 
--siempre --Humberto no menos excitado. 

En los dias siguientes, Marcos se la pasa en la discoteca buscando a Pinocho. Tampoco ve a Humberto que le dice que tiene trabajo. Todos las dias él y Pinocho retozan tan a gusto el uno sobre el otro. Necesitado, solo y molesto con Pinocho, Marcos se presenta de sorpresa en casa de Bruno. El brasileño lo mira excitado: 
--ya te estabas tardando....


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